Este pequeño estudio en Rewal, situado en una ubicación privilegiada junto al mar Báltico, está orientado directamente hacia el paseo del lago, demostrando que los pisos no necesitan ser siempre grandes para ser convincentes.
Se requería un diseño sobrio pero exclusivo y elegante para este espacio. Los propietarios también deseaban un interiorismo moderno y sencillo. Estos contrastes se lograron combinando hábilmente superficies grises y negras con materiales naturales. Así, se aprovechó al máximo el potencial del pequeño piso, especialmente con sus grandes superficies acristaladas, mientras se mantenía un concepto cromático discreto, según los deseos del cliente. El laminado de madera agregó calidez al interior, creando un ambiente acogedor que se integra con la naturaleza circundante.
Las superficies cubiertas con espejos en el piso son un elemento llamativo. Para equilibrar los colores predominantes, se han incorporado numerosos espejos y superficies de cristal. Estos elementos amplían visualmente la estancia central, un salón abierto con cocina, al tiempo que aprovechan de manera inteligente la luz natural que entra a través de las grandes superficies acristaladas. Además, reflejan los colores cambiantes de la naturaleza y las impresionantes vistas al mar.
Los frontales acrílicos lisos de la colección RAUVISIO brilliant mate se fusionan perfectamente con el conjunto, creando armonía y cumpliendo con creces la exigencia de una solución moderna y sobria que cautiva a quienes la observan. Así es como convertimos en realidad una vivienda soñada.